Al decir Yo Soy, reafirmo mi Identidad Espiritual
En el Antiguo Testamento leemos: “Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. […] Este es mi nombre para siempre; con él se me recordará por todos los siglos”. (Éxodo 3:14-15). Y como “lo que está arriba es como lo que está abajo”, en “El Libro de Oro de Saint Germain”, a la letra dice: “Cuando tú dices ‘YO SOY’, sintiéndolo, abres la fuente de la Vida Eterna para que corra sin obstáculos a lo largo de su curso; en otras palabras, le abres la puerta ancha a su flujo natural. […] ‘YO SOY’ es la plena actividad de Dios. Te he colocado frente a frente infinidad de veces la Verdad de ‘DIOS EN ACCIÓN’. Quiero que comprendas que la primera expresión de todo ser individualizado en cualquier parte del Universo, bien sea en pensamiento, sentimiento o palabra, es ‘YO SOY’, reconociendo así su Propia Victoriosa Divinidad. […] Cuando piensas en la expresión ‘YO SOY’, significa que tú ya sabes que tienes a Dios en Acción, expresado en tu vida. No permitas que las falsas apreciaciones y expresiones continúen gobernándote y limitándote”. (Págs. 6-7. Op. cit.).
Yo Soy el que Soy, en el Judaísmo.
“Yo Soy el que Soy (en hebreo, Ehye ’ăšer ’ehye), es la más común traducción en español de la respuesta que Dios usó en el Tanaj (Antiguo Testamento), cuando Moisés le preguntó por su nombre. Es uno de los versos más famosos de la Torá. Lhiyot, לִהיוֹת significa ‘ser’ o ‘estar’ en hebreo; ‘Ehyeh’ es la forma imperfecta singular de la primera persona en tiempo futuro, porque el tiempo presente en hebreo está implícito. Ehyeh Asher Ehyeh literalmente se traduce como ‘Yo Seré El Que Seré’, con las consiguientes implicaciones teológicas y místicas de la tradición judía. Sin embargo, en la mayoría de las Biblias en español, en particular, la versión Reina-Valera, la frase se traduce como ‘Yo Soy el que Soy’.
Ehyeh-Asher-Ehyeh (a menudo contraído como YO SOY) es uno de los Siete nombres de Dios que tuvieron un cuidado especial por la tradición judía medieval. La frase también se encuentra en otra literatura religiosa del mundo, que se utiliza para describir el Ser Supremo, en general, refiriéndose de nuevo a su uso en el Éxodo. La palabra Ehyeh, es considerada por muchos estudiosos rabínicos como una derivación en primera persona del Tetragrámaton[1].” (“Wikipedia. Yo Soy el que Soy”).
[1]”Tetragrámaton (en griego antiguo: Τετραɣράμματον [tetragrámmaton]; en latín: Tetragrammaton), es la combinación de cuatro letras hebreas יהוה transliterada como YHVH o YHWH, que la Biblia hebrea emplea como nombre propio del Dios único de judíos, samaritanos y cristianos.” (“Wikipedia. Tetragrámaton”). Estas cuatro letras hebreas, pronunciadas como Yod-He-Vaw-He, conforman los nombres de JeHoVaH y de YaHVeH.
Las Enseñanzas de Jesús el Cristo.
Todos los Libros Sagrados tienen tres niveles de interpretación: Propio, Figurado y Jeroglífico, o como lo expresó el filósofo griego Heráclito de Éfeso, el del Parlante, el del Significante y el del Ocultante. Al leer cualquier texto sagrado de manera literal, nos quedaremos siempre en el primer nivel de interpretación y que nos puede parecer ilógico o absurdo. En los textos tibetanos, el nivel de interpretación se realiza de acuerdo al color de la tinta empleada.
El mismo Jesús utilizó dos lenguajes, uno para el pueblo en general, alegórico, en parábolas y otro, directo para sus Discípulos: “Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas? El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del Reino de los Cielos; más a ellos no les es dado. […] Por eso les hablo por parábolas: porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden”. (Mateo 13:10-11 y 13). Y más aún: “No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, y se vuelvan y os despedacen”. (Mateo 7:6). Leer el libro: “Cristianismo Esotérico. Los Misterios de Jesús de Nazareth”, de Annie Besant.
“La Gnosis Cristiana tiene a considerar a San Juan Evangelista como el verdadero revelador de la Conciencia Cósmica de Jesús, dejando a los padres de la Iglesia como Orígenes o Pablo de Tarso, como meros arquitectos de un sistema religioso-económico.” (Pág. 53. “Conceptos básicos del esoterismo”. Juan de Teruel). Esta es la relevancia de San Juan, quien nos transmite las verdaderas Enseñanzas de Jesús el Cristo. Respecto a la importancia esotérica que tiene el Evangelio de San Juan, el Dr. Serge RaYNaud de la FerRIère, escribió: “Para volver a nuestro punto de vista, declaremos que muchos de los textos que parecen simples, son, sin embargo, de una alta enseñanza; y no nos referimos al Evangelio según San Juan, sobre el cual descansa todo el estudio de la Masonería[2], ni al Libro de Daniel que se presenta como una filosofía cualquiera y constituyó la obra clave de los Esenios, ni al Toldos Jhesu, una de las 3 obras escritas en hebreo, que es la expresión de la Tradición admitida por la Sinagoga, sino a cuentos infantiles, a leyendas insignificantes y hasta a hechos históricos provocados”. (Pág. 262. “Los Grandes Mensajes. Tercer Mensaje. Los Misterios Revelados”).
[2]”No carece de interés notar a este propósito que, en las organizaciones masónicas que han conservado más completamente las antiguas formas rituales, la Biblia colocada sobre el altar, debe estar abierta precisamente en la primera página del Evangelio de San Juan.” (Pág. 280. “Consideraciones sobre la Iniciación”. René Guénon).
Juan, el Iniciado en los Sagrados Misterios.
El Gnóstico James Morgan Pryce, escribió en el Prefacio de su obra, “El Apocalipsis Develado. Una interpretación esotérica de la Iniciación de Ioannes”: “El propósito de este libro, es demostrar que ‘El Apocalipsis’, es un verdadero manual de entrenamiento espiritual y no, como convencionalmente se lo interpreta, una profecía, o historia criptográfica. En las página siguientes hallará el lector una aclaración completa del enigma del Apocalipsis con amplias pruebas de su correcta solución; pero como la materia que aquí hemos tratado, es no obstante, conocida de muy pocos estudiantes de la Ciencia Sagrada, la cual ha sido para muchos un verdadero libro sellado, la exposición que aquí hacemos es en forma sencilla y clara”. El Maestre Serge RaYNaud de la FerRIère, menciona al “Apocalipsis”, como un libro de la Cábala Cristiana.
Somos Seres Divinos, porque Dios mora en Nuestro Interior.
“Si rezas a Dios, entonces rezas desde tu punto de vista a una instancia superior. Pero todo es Uno, no existe la separación, y por eso estás rezándote a ti mismo, a tu semilla divina, a tu propia energía divina. Esta energía divina puede volver a programar tu subconsciente y tener efectos en todas tus células. Lo que has aprendido a aplicar conscientemente en tus últimos Entrenamientos, es lo mismo que hacen los demás Seres Humanos de forma inconsciente a través de sus rezos. Sin embargo, es mucho más rápido y eficaz que generes tus propios cambios de forma consciente, creando nuevas verdades en ti mismo y transmitiéndolas a tu subconsciente y a tus células, en vez de pedir que una energía superior cumpla tus deseos y escuche tus rezos. Cuando rezas a Dios o a un ser supremo, estás rezándote a ti mismo.” (“Maestría con los Círculos de Trigo. Entrenamiento 27”). En la Primera Epístola a los corintios, Pablo de Tarso escribió: “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?” (1 Corintios 3:16).
Theos Bernard narra detalladamente sus arduas disciplinas de Hatha Yoga, realizadas en la India, hasta que alcanzó el Samadhi, el Estado Trascendental del Yoga: “En medio de todo algo resonó y todo quedó en silencio. Aún estaba la luz y me absorbía. No pude hallar más su origen. Todo era luz. Yo también. Todo era paz. […] Me señalaron que una completa Unión con la realidad sólo podía cumplirse por la completa unión del espíritu con la materia. No era eludir el mundo físico, porque éste era parte del cósmico. Todo es uno. Lo físico, lo mental y lo espiritual jamás pueden separarse. Son meramente diferentes aspectos de lo único. El desarrollo de un aspecto es el de los demás. La manera de despertar totalmente la conciencia es vivir”. (Págs. 232 y 234. “El Camino Práctico del Yoga; El Cielo está en Nosotros. Capítulo XX. Mi Iniciación Final”).
“Jesús les respondió: ¿Y no está escrito en la ley de ustedes: Yo dije, ustedes son dioses?” (Juan 10:34). Jesús el Cristo se refirió a Salmos. “Yo dije: Vosotros sois dioses, Y todos vosotros hijos del Altísimo.” (A.T. Salmos 82:6). Con base a todo lo anterior, concluyo que una de las Claves (del latín, Clavis, Llave), que nos dejó el Hijo de Dios, y que debemos de practicar diariamente como Afirmación y Mantra, es: “YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD, Y LA VIDA” (Juan 14:6). “Y a ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.” (Mateo 16:19).
Eduardo Flores Zazueta